El big data generado por las interacciones de los usuarios en sus búsquedas es una herramienta poderosa para dirigirse al cliente adecuado en el momento justo y con una oferta que no pueda rechazar.
Las crecientes demandas de los consumidores de actualizaciones inmediatas de disponibilidad, junto con un periodo de atención muy corto, obligan a las marcas a ofrecer versiones optimizadas de un anuncio en tiempo real.
El big data generado por las interacciones de los usuarios en su búsqueda de las vacaciones perfectas es una herramienta poderosa que puede utilizarse para dirigirse al cliente adecuado en el momento justo y con una oferta que simplemente no pueda rechazar. Los conjuntos de datos podrían incluir el número de visitas, el volumen de páginas visitadas, el tiempo transcurrido desde la última visita, posición dentro del canal de ventas, si es un cliente nuevo o ya existente, rango de precios y estacionalidad. Estos conjuntos de datos pueden integrarse con datos específicos del itinerario de compra como ruta, destino, duración, tipo de producto, puntuación del hotel, clase en la que se viaja, tipo de vuelo (sólo conexiones directas o con escalas) y la antelación con la que se busca el billete.
Las vacaciones de verano suelen ser reservadas con tres veces más antelación que los viajes de invierno, lo que significa que será más probable que las ofertas de última hora conduzcan a la conversión en esos meses de temporada baja. Pero no sólo hay que tener en cuenta la temporada, ya que el día de la semana también puede afectar a los niveles de reservas: durante los días laborales los consumidores son más propensos a realizar sus compras de última hora más que los fines de semana, lo que puede deberse al mercado del turismo de negocios y a la capacidad de los viajeros corporativos de pagar precios más elevados.
No Comments